7 cosas que te convierten en el mejor papá del mundo
junio 8, 2015
“Los niños son de las madres y las niñas de los padres”, no sé qué tanto haya de cierto en esta popular afirmación que muy seguramente has escuchado dentro de la cultura hispana.
Como hija, madre y padre que fuí al mismo tiempo puedo concluir varias cosas al respecto, una de ellas es que tanto mamá como papá juegan un rol vital en el núcleo familiar con funciones perfectamente definidas, pero como los protagonistas y el honor hoy corresponde a los padres por ser su día especial del año “el día del padre”, es en ellos en quién nos vamos a concentrar (aquí incluyo a las mujeres valientes que por diferentes circunstancias desempeñaron o desempeñan junto al papel propio de madre, también el rol paterno).
Desde el mismo momento en que llega el anuncio de “la visita de la cigüeña a casa” (no hace falta mencionar la primera parte de la historia que ya todos conocemos sobre el proceso en cuestión), empieza la aventura para convertirse en un papá genial, algunos se demoran un poco más en reaccionar que otros, pero el hecho es que la responsabilidad ya está dada y es “la vida de un hijo”, toda una vida que empezar a construir; claramente cada uno dentro de su propio estilo puede llevar el galardón de “un papá genial”.
Ya que el tiempo no tiene marcha atrás, un papá genial tiene claro que en este caso no existen las segundas oportunidades para desempeñar lo mejor posible su rol, ellos desarrollan toda una estrategia cargada de protección, amor, cuidado y sabiduría (mmm bueno con respecto a la sabiduría “cuando son primerizos” muchas cosas las descubren o deducen en el camino, lo cuál es perfectamente válido y hasta resulta divertido, también recurren a la memoria antigua con la pregunta ¿qué era lo que hacía mi padre en estos casos?) y entonces, empieza la función:
1. Amor de hogar
Cuando los hijos crecen respirando el sentimiento del amor, ellos lo desarrollan de manera natural. ¡Cuando crezcan, serán capaces también de amar!
2. Momentos solo de los dos
Pequeños o grandes momentos quedan plasmados de por vida en la memoria y corazones de tus hijos como un álbum mental acompañado no solo de colores, también de sensaciones, sonidos, aromas… Un papá genial comparte la mayor cantidad de momentos con sus hijos haciéndolos inolvidables. Dibuja la mayor cantidad de experiencias maravillosas, esas que roben una sonrisa de su rostro con tan solo pensar en ellas cuando sean grandes.
3. El deporte es salud
Inculcar a los hijos actividades saludables, hace que desarrollen hábitos, amor y respeto por sí mismos y el deporte es la mejor manera de divertirse juntos inculcando la conciencia de una vida saludable.
4. Arquitecto de confianza
Demostrarle a los hijos cuán inteligentes son y que ellos puedan ver tu confianza en ellos les despierta su sentido de seguridad propia y fortaleza mental, de esta manera no se detendrán antes los obstáculos de la vida, siempre creerán en ellos y sus capacidades.
5. El lazo invisible
Tomar a tus hijos de la mano, permitirles dormir en ciertos momentos en tus abrazos transmitiendo un sólido sentimiento de protección, hará que cuando crezcan traten de acudir a ti antes que a cualquier otra persona cuando necesiten sentirse seguros y/o protegidos.
6. Padre, amigo y confidente
Orienta, enseña y corrige a tu hijo/a, pero más importante aún, deja siempre la puerta abierta para que sepa que puede hablar contigo sobre cualquier cosa, nadie más puede aconsejar mejor a un hijo/a que un papá genial, siempre serás la primera opción a la que ellos acudan.
7. Herramientas de vida
Un papá genial da a sus hijos las herramientas necesarias para enfrentar la vida real y ser capaces de construir un futuro lleno de oportunidades, enseñan a cambiar una llanta, a defenderse con su alimentos, procuran que sus hijos reciban la más completa educación, enseñan que el intelecto es más importante que el mundo material, interiorizan que tanto si como no son una respuesta y las dos son completamente válidas, muestran la diferencia entre lo bueno y lo malo para sí mismos y aunque para un papá genial siempre hay un camino de regreso a casa para sus hijos, saben que ellos ya cuentan con lo necesario para descubrir el mundo por sí mismos y construir el resto de sus vidas sobre la base más sólida “ellos no necesitarán regresar a casa” más que de manera momentánea.
No importa cuantos años pasen, un padre maravilloso le deja saber a su hijo cuánto lo ama desde el mismo momento que se entera de su existencia y que todo, absolutamente todo valió la pena.
Así que dicho esto, los hijos son tanto de mamá como de papás y el trabajo genial que realices en los primeros años de sus vidas dependerá el resto de ella porque recuerda “los hijos son prestados”, cuando menos te des cuenta, ellos estarán haciendo su propia vida llevando consigo toda esta genialidad que les inculcaste.
Disfruta a tu hijo al máximo y ¡Feliz día del padre!